Hace unas semanas se produjo la aprobación inicial del nuevo PXOM en la ciudad de Vigo o, lo que es lo mismo, al Plan General de Ordenación Municipal. Ante esta situación, vivimos una suspensión de licencias en la ciudad por un plazo máximo de 2 años, o hasta que se apruebe definitivamente este nuevo planeamiento…
De la noche a la mañana nos encontramos con una ciudad que tiene un planeamiento del año 1993, un instrumento de ordenación provisional (IOP) de reciente instauración, que venía a paliar los efectos de la derogación del plan del 2008, anulado después de varios años de vigencia por sentencia judicial, y un planeamiento en aprobación inicial al que le quedan un par de años para entrar en vigor.
Cuando se aprobó la IOP casi todos pensábamos que era un avance del futuro plan general y que aquello que estaba en vigor sería fielmente recogido por el futuro planteamiento, pero esto no es así. De hecho, se observan cambios generalizados entre los dos planeamientos, pasando fincas que eran edificables a no serlo, o fincas en licencia directa a quedar sometidas a algún instrumento de planeamiento.
Y la pregunta que ahora nos hacemos es: ¿Y ahora qué?. Pues en principio entramos en un mar de dudas, ya que el documento contempla la posibilidad de que se otorguen licencias en aquellos casos en los que el planeamiento actual y el aprobado coincidan. En este marco, solo podemos esperar que se aplique el criterio del cumplimiento más restrictivo porque coincidir, lo que se dice coincidir, creo que será imposible.
El tiempo nos dirá a qué atenernos con respecto a la situación del urbanismo de Vigo; pero, de momento, estamos en fase de estudiar el documento a fondo y hacer cábalas acerca de su interpretación.
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